Estaba con mi enamorada
en una pollería durante la época de estudiante universitario y tenía
poco dinero. Habíamos pedido un modesto cuarto de pollo para comerlo
entre nosotros dos.
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Yo comento que es muy poco y que no nos va a
satisfacer. Mi enamorada comenta que en realidad sí nos va a ser
suficiente porque en una ocasión ella, su hermana y su cuñado
comieron medio pollo entre
los tres y les satisfizo. Entonces me pongo a calcular cuánto se consumió en esa ocasión y cuánto ahora. Luego le digo a mi enamorada: “Lo que pasa es que esa vez cada uno de ustedes comió más de lo que ahora nosotros comeremos. Supongamos que a todos nos toca partes iguales. Cuando entre ustedes tres comieron ½ pollo, es decir cada uno consumió:
los tres y les satisfizo. Entonces me pongo a calcular cuánto se consumió en esa ocasión y cuánto ahora. Luego le digo a mi enamorada: “Lo que pasa es que esa vez cada uno de ustedes comió más de lo que ahora nosotros comeremos. Supongamos que a todos nos toca partes iguales. Cuando entre ustedes tres comieron ½ pollo, es decir cada uno consumió:
En cambio ahora
nosotros comeremos ¼ de pollo entre dos a cada uno nos toca
Como
Resulta que en la
primera ocasión se consumió mayor cantidad de pollo de lo que ahora
se comerá”.
Este es un ejemplo de
como la matemática nos puede ayudar a analizar situaciones de la
vida real.
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